VIDA CON SENTIDO. “¡Saca buenas notas en la escuela! ¿Para qué? Para que puedas ir a una buena universidad. ¿Para qué? Para que puedas conseguir un buen empleo. ¿Para qué? Para que te paguen un buen salario. ¿Para qué? Para que puedas tener una buena jubilación. ¿Para qué? Para que no te falte nada mientras te mueres”.

La fe va más allá de todo eso. Trasciende cada criterio. Propicia un auténtico triunfo en esta tierra. Proyecta a las dimensiones eternas. Hace ver que el mayor objetivo de la vida es la edificación del carácter; pues el propósito de la fe, es inculcar la esperanza de una vida virtuosa sin fin en el reino de Cristo.